Plaza de la Libertad



Plaza de la Libertad en el plano basado en
Francisco Coello de 1858  y en 2012












Algunas notas urbanísticas sobre la plaza de la Libertad
Venancio Gombau, 1919 
Fotografía publicada en la revista La Esfera el 7 de agosto de 1920



Lo cierto es que son pocas las imágenes antiguas de la plaza de la Libertad que podemos contemplar. Apenas un manojo de fotografías anteriores a la colocación en 1921 de los bancos corridos que habían sido retirados de la Plaza Mayor. Entre ellas, esta fotografía de Venancio Gombau de 1919 en la que aparte del palacio de Figueroa, sede del Casino de Salamanca que presenta una imagen anterior a la reforma que en los años treinta dirigió D. Santiago Madrigal, podemos ver un buen trozo del jardín que ocupaba este espacio urbano. 
La plaza o plazuela, en una terminología más de la época, cuyo nombre de la Libertad le fue otorgado en 1842 en honor a la liberación del dominio francés en la Guerra de la Independencia, había nacido ese mismo año con la ampliación hacia el norte de la calle Peripacho, (corrupción de Pelay Pacha) una estrecha calle que unía la calle Concejo con la de Cabrera, rebautizada Espoz y Mina también en 1842, a costa de algunos de los huertos y construcciones del convento de Carmelitas Descalzos que ocupaban la zona desde 1597 y que había sido desamortizado en 1836. El único vestigio del convento que ha perdurado hasta nosotros es la iglesia del Carmen de Arriba con entrada por la plaza de los Bandos. Su espacio, yermo y elevado respecto de las calles adyacentes, fue utilizado, según Villar y Macias, para celebrar corridas de toros, "dónde toreó por última vez en Salamanca el renombrado Montes"
La plaza de la Libertad fue enrasada con las calles contiguas en 1861 y ajardinada por primera vez en 1868 con un jardín diseñado por D. José Secall y colocada en ella, como homenaje a la batalla de Arapiles y a la revolución del 68, una columna dórica en la que un león rompía las cadenas que aprisionaban un escudo de España. La pieza, obra de D. Nicasio Sevilla autor también de la figura de Fray Luis de León en el Patio de Escuelas frente a la fachada de la Universidad, resultó muy deteriorada en los cambios políticos que llevaron a la Restauración en 1875, siendo derribada definitivamente en 1883. 
En 1909 se colocó un sencillo obelisco como recuerdo de los estudiantes fallecidos durante los Sucesos del 2 de abril de 1903, que desapareció probablemente a inicios de la Guerra Civil. El gran cambio en su fisonomía tuvo lugar en 1921 cuando se instalaron los asientos canapé, de piedra con respaldo de hierro, retirados de la Plaza Mayor. En esta intervención se modificó la vegetación del jardín con palmeras y cipreses que han caracterizado a la plaza desde entonces. La fuente y una linotipia de El Adelanto, ya retirada, fueron el resto del mobiliario urbano que la ocupó. Tras la Guerra Civil recibió el nombre de plaza de Onésimo Redondo, recuperando el de Libertad en 1979.


© C.H. fc 25/04/16 Rev. 01(19/04/19)




Palmeras en la ciudad
Plaza de la Libertad. Tarjeta Postal de Ediciones Unique


Las 12 palmeras chinas desahuciadas de la Plaza Mayor, donde fueron plantadas en 1917, se trasladaron al lado norte de la plaza de la Libertad en 1930, poco tiempo antes de obtenerse esta imagen.

Compartieron destierro con los bancos corridos diseñados para ser colocados en la Plaza Mayor en 1872. Estos bancos disponían de asientos de granito, al parecer extraído del puente de Alba de Tormes durante su reforma de 1871, y de respaldos de rejería fabricados por D. Anselmo Pérez Moneo. Una buena parte de ellos se trasladaron a la plaza de la Libertad en 1921, otros a la plaza de los Bandos y algunos más a la plaza de Colón. 
También ese año se repartieron los jarrones-jardineras de hierro fundido, fabricados por Moneo e Hijo y Cª, que estuvieron colocados desde 1891 en los extremos de los bancos corridos de la Plaza Mayor. Estos jarrones sustituyeron a los que se colocaron inicialmente en 1872 y que habían sido fundidos por D. Vicente Maculet. La imagen muestra los jarrones recolocados en la plaza de la Libertad y que, como es fácil de comprobar, no son los que están hoy instalados. Salvo que estemos equivocados, solo quedan en nuestras plazas tres de los jarrones originales de 1891, los tres ubicados en la plaza de los Bandos y en un lamentable estado de conservación.

Al fondo de la imagen está la casa que D. César Santos Allén mandó construir en 1906 en la calle Espoz y Mina, esquina con la cuesta del Carmen, con proyecto del arquitecto D. Joaquín de Vargas y en estilo ecléctico. El edificio remozado, continúa en su lugar, con la modificación del ático retranqueado ahora convertido en un piso más.

La hilera de casas de la derecha fue mandada construir, entre 1861 y 1864, por D. Domingo Aguilera y Contreras, marqués de Benalúa, en el solar que había adquirido en 1858 al Estado tras la desamortización del convento de carmelitas descalzos que había ocupado el lugar desde finales del siglo XVI y cuyo último vestigio es la iglesia del Carmen de Arriba en la plaza de los Bandos. Los bajos de la casa de la hilada que hace esquina con la calle del Concejo, la más próxima en la imagen, fueron ocupados desde 1916 por el popular comercio Gran Bazar Colón, sustituyendo al taller del pintor y dorador D. Manuel Ramírez de Arellano. Esta casa resultó dañada por una bomba que cayó en la manzana el 21 de enero de 1938 durante la Guerra Civil. Al finalizar la contienda el entonces propietario del solar, el empresario y almacenista de coloniales y ultramarinos D. Baltasar Moretón Martín, construyó el edificio actual con proyecto historicista de su amigo el arquitecto D. Francisco Gil, quedando rota la homogeneidad de la hilada de casas que muestra la imagen.

A pesar del tiempo transcurrido y las pequeñas diferencias comentadas, y otras que quedan por comentar, la magnífica postal de Unique es perfectamente reconocible en la actualidad. Eso sí, las palmeras son ahora mucho más altas.
© C.H. fc 24/04/19 Rev. 00